Arabia Saudí tienta a Messi con el mayor contrato de la historia del deporte
El viaje de Leo Messi a Arabia Saudí ha supuesto un bombazo interno en el Paris Saint-Germain y el fin de la relación entre ambos. El club parisino sancionó al jugador argentino de empleo y sueldo durante dos semanas, los ultras del PSG profirieron graves insultos contra él el pasado miércoles frente a la sede de la entidad francesa y la salida de Messi parece inminente. Arabia Saudí parece que puede ser su próximo destino con un contrato histórico que podría ser el más grande en la historia del deporte.
Se ha hablado mucho sobre un posible regreso de Leo Messi al Barcelona. De hecho, Eduardo Inda ya desveló en El Chiringuito de Jugones que el Barça, con Joan Laporta a la cabeza, le ha ofrecido a Leo Messi 10 millones netos por temporada en un contrato de dos años fijos y uno opcional.
Pero parece que su próximo destino estará fuera de Europa. Tras el último desplante del argentino y la sanción del PSG al jugador, la salida de Messi de París si parece que se efectuará a final de esta temporada. El destino podría ser Al-Hilal, equipo del Rey de Arabia Saudí, y principal rival de Al-Nassr, equipo de Cristiano Ronaldo.
«Tiene una oferta de 600 millones de dólares del Al-Hilal, el equipo del Rey. Messi viajó al país a conocerlo, ver el lugar donde podría vivir. Si su familia da el ‘ok’ jugará en Arabia Saudí. No va a ir a Barcelona. Quiere volver cuando se retire», afirmó Marco Kirdemir, agente FIFA, en el programa Goles con Parrado en Radio Marca.
Una oferta de 600 millones de dólares que sería el mayor contrato en la historia del deporte para Leo Messi. Arabia Saudí tienta de esta manera a uno de los mejores jugadores de la historia para juntarlo con Cristiano Ronaldo, otra leyenda de la historia del fútbol, en una Liga que sigue creciendo a golpe de talonario.
«Si hubiera viajado a un país que no tuviera problemas con Qatar, no hubiera habido tanta especulación. Esto ha enfadado al presidente del PSG», culminó Marco Kirdemir afirmando que el objetivo de Arabia Saudí es gastarse todo el dinero posible para tener la mejor competición y albergar el Mundial de 2030.